Guía Turismo

   viernes 25 de abril del 2025. LXV La Legislatura de la Paridad, la Inclusión y la Diversidad.
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Los centros turísticos estudiados son un ejemplo representativo de la actividad en la república mexicana, en virtud de la relevancia económica, social y ambiental que se presenta a continuación, además de acusar condiciones institucionales e históricas muy útiles para conocer la transversalidad del sector y los impactos positivos y negativos que conlleva, ya que millones de familias dependen de este sector económico, lo que representa un reto para la comprensión de este fenómeno en cada una de las localidades donde se practica.
Como se puede observar en la gráfica de llegadas de turistas internacionales y nacionales a los destinos turísticos, se trata de un sector en crecimiento, que a pesar de la pandemia de covid, que se recuperó en casi tres años, existen reportes sobre la tendencia ascendente en la llegada de inversión extranjera directa, testimonio de la rentabilidad que siguen ofreciendo la mayoría de las localidades del país, al menos para los próximos años.

Es necesario precisar que la eficacia analítica de los resultados estadísticos, así como su interpretación, depende en gran medida del contexto, por ello debe valorarse desde las circunstancias de tiempo, lugar y pertinencia de cada destino. Esto significa que siempre será importante aplicar un análisis costo beneficio para disponer de elementos más sólidos para evaluar el aprovechamiento o uso de los recursos; por ejemplo, dará la pauta sobre la pertinencia de las métricas utilizadas, ya que no pueden compararse alejados de la realidad que vive la localidad (Glaesser, 2024).  

1 Ciudad de México 

La Ciudad de México (CDMX), como prototipo de centro turístico urbano consolidado, representa a las grandes ciudades que concentran la mayor parte de la producción turística, a la vez que se caracterizan por ser centros de turismo regionales, como son los casos típicos de Guadalajara, Monterrey, Puebla, Oaxaca, Mérida, etc. Sin embargo, los problemas urbanos y de infraestructura y los impactos medio ambientales y los sociales aplican a todas las ciudades turísticas (Ver Anexo III Base de datos por municipios/alcaldías y localidades turísticas).  

1.1 Dimensión económica de la sostenibilidad

• La CDMX se ubica en el Valle de México, en la mesa o altiplano central del país en su extremo sur, a una altitud de 2,240 metros sobre el nivel del mar. Esta ubicación geográfica le confiere un clima templado de montaña, con variaciones importantes debido a la altitud y la topografía del terreno circundante. La temperatura máxima promedio es de 25°C y la mínima de 5°C, en el mes de enero, régimen de lluvias en verano.

• Es un centro turístico tradicional consolidado que mantiene su importancia y atrae de manera creciente a turistas nacionales e internacionales. Se desarrolla en la ciudad más grande del país, con más de 9 millones de habitantes, y que además es el centro de la Zona Metropolitana del Valle de México, la más grande del país en población y economía, con una población de 22 millones de habitantes; contribuye con el 26% del producto interno bruto nacional.

• Se caracteriza por su posición central y estratégica en el territorio nacional; está rodeada por el estado de México al norte, este y oeste, y por el estado de Morelos al sur. Además, por su localización central, conectividad y proximidad con otras entidades y localidades, forma la región turística del centro del país, e integra como área de influencia a las capitales de los estados de México, Hidalgo, Morelos, Puebla y Tlaxcala y sus áreas de influencia. Esta región contribuye con el 33% del PIB turístico nacional.

• Es centro de recepción y distribución del turismo internacional por su conectividad y cercanía con otras localidades que poseen múltiples y diversos atractivos, ya que cuenta con corredores de traslado que lo vinculan con dichos centros turísticos, que se encuentran en promedio en un radio de 100 kilómetros de distancia, con recorridos de alrededor de dos horas desde la ciudad.

• Cuenta con una gran número de atractivos turísticos que se distinguen por su variedad y diversidad histórico-monumental, cultural, recreativa y gastronómica. Es el centro turístico más importante del país, ya que contribuyó con el 18% del PIB Turístico (PIBT) nacional en 2018, es decir, 331.5 miles de millones de pesos corrientes de ese año a precios básicos.

• Por los servicios que ofrece, el turismo es uno de los sectores más importantes de la economía de la CDMX, ya que en 2018 contribuyó con el 23% de los servicios totales del país.

• No obstante, la actividad turística se concentra en su mayor parte en cuatro alcaldías, donde está la mayor parte de la capacidad hotelera de la ciudad y de la actividad turística.

• Las remuneraciones totales turísticas de la CDMX ascendieron a 69 mil 407.6 millones de pesos, las mayores del país, que concentran el 18% del total nacional.

• La productividad laboral de las actividades turísticas representó 1,033,062 pesos corrientes por trabajador al año, la más elevada de todas las entidades y muy por arriba del promedio nacional, que fue de 817,979 pesos para ese mismo año.

• Sobresale por ser el principal centro receptor de turistas, con 11,581,701, que representan el 9% del total; no obstante, la mayor parte son turistas nacionales con 9,389,468, es decir, alrededor del 81% del total. Sólo 2,192,233 son turistas extranjeros. Sin embargo, ocupa el segundo lugar como centro receptor del turismo internacional, con 2.2%del total.

• La concentración de turistas en la ciudad también se distingue espacialmente, ya que a pesar de que prácticamente todas las alcaldías presentan actividad turística, el 80% se concentra en el centro histórico de la ciudad y sus alrededores, integrada por las alcaldías Cuauhtémoc, Miguel Hidalgo, Benito Juárez y Venustiano Carranza.

• También destaca por contar con la mayor capacidad de alojamiento y servicios conexos y complementarios en la república mexicana.

• La llegada de turistas nacionales e internacionales a la CDMX entre 2012 y 2022 mostró un flujo estable hasta 2019, ya que en 2020, debido a la emergencia sanitaria por covid 19, el flujo se redujo drásticamente. El turismo nacional fue el más perjudicado porque hasta el 2022 no había recuperado los niveles prepandemia, mientras que el turismo internacional sí lo hizo. La Sectur CDMX informó que durante 2023 logró superar los niveles prepandemia (Excelsior, 2023).

La estacionalidad de la demanda turística difiere de acuerdo con el tipo de turismo, nacional o internacional. Es de destacar que la llegada total de turistas a la CDMX presentó una variación cíclica con picos en los meses de marzo, julio y noviembre, siendo este último el más elevado. Asimismo, se registran caídas en los meses de abril, mayo, agosto, septiembre y diciembre. La afluencia de turistas nacionales se concentra en los meses de mayo a diciembre, y la de extranjeros de enero a marzo, como se muestra en las siguientes gráficas.

La estimación del gasto promedio por visitante de la CDMX no se puede realizar con certidumbre debido a que existen muchas fuentes con estimaciones muy diversas.

1.2 Dimensión ambiental de la sostenibilidad

• El flujo masivo de turistas a la CDMX, combinado con la alta densidad poblacional, impone una presión significativa sobre los recursos naturales y la infraestructura de la ciudad.

• Actualmente, la CDMX enfrenta un deterioro considerable en la calidad ambiental. De sus 16 alcaldías, nueve presentan un riesgo elevado de escasez y suministro constante de agua.

• La afluencia turística a la CDMX provoca que la población de la ciudad crezca más que el doble, lo que agrava la presión sobre los recursos naturales y la emisión de contaminantes, incluidos residuos sólidos y gases de efecto invernadero. El turismo requiere un suministro continuo de agua, que ya es un recurso escaso, además de infraestructuras adecuadas para su movilidad y disfrute.

• De hecho, se da preferencia en la asignación de recursos hídricos a las alcaldías con mayor actividad turística, que gozan de un mayor suministro. Las alcaldías de Cuauhtémoc, Miguel Hidalgo y Benito Juárez registran el mayor consumo de agua per cápita, superior a los 300 litros diarios por persona.

• La estimación del consumo de agua por la actividad turística en estas alcaldías muestra que durante una estancia promedio de nueve días, los turistas consumen el 16% del total de agua potable. Este desequilibrio no sólo compromete la disponibilidad del agua en las alcaldías con menor interés turístico, sino que también afecta a las comunidades más vulnerables, donde la alta densidad poblacional y la falta de infraestructura hídrica agravan la situación.

• Además, estas alcaldías generan las mayores emisiones de residuos sólidos y gases de efecto invernadero (GEI), debido a que el consumo turístico genera huellas de carbono por la utilización de dispositivos electrónicos para el clima y el confort, así como por el uso de medios de movilidad.

• El deterioro ambiental agrava los efectos del cambio climático y coloca en riesgo la actividad turística, aunado a la insuficiencia de áreas verdes, lo que dificulta el disfrute de los atractivos y recursos turísticos por las altas temperaturas y la mala calidad del aire. Estas condiciones adversas impulsan el uso de medios de transporte para desplazarse, lo que aumenta aún más las emisiones de CO2.

• La falta de áreas verdes no sólo afecta la calidad de vida de los residentes, sino que también reduce el atractivo de la ciudad para los turistas, quienes buscan entornos más saludables y confortables en sus visitas.

• La presión ambiental adicional propicia una mayor vulnerabilidad de las áreas de conservación de la CDMX, espacios que son cruciales por sus servicios ecosistémicos. Estos servicios incluyen la regulación del clima, la mejora de la calidad del aire y la provisión de espacios recreativos.

• Sin embargo, la adición de la población turística, junto con una deficiente planificación y la invasión de suelo de conservación, pone en riesgo la calidad de estos servicios ecosistémicos, lo que afecta tanto el bienestar de los residentes locales como la experiencia y disfrute de los turistas, por lo que es urgente la elaboración de estrategias sostenibles y de una mejor gestión ambiental.

• Aunque la población turística contribuye sólo con el 17% de las emisiones de CO2 anuales, su adición al consumo residente exacerba la problemática ambiental y deteriora la calidad del aire. Este incremento de turistas, sin una adecuada gestión y regulación ambiental, pone en riesgo la sostenibilidad de la ciudad y del turismo.

• En consecuencia, el incremento constante de turistas sin una estrategia de manejo sostenible aumenta la presión sobre los recursos y los sistemas de gestión de residuos de la ciudad. La falta de una planeación adecuada para equilibrar el consumo de recursos entre residentes y turistas contribuye a la degradación ambiental y a la saturación de infraestructuras esenciales, como las vías de comunicación y el sistema de movilidad, lo que limita también el disfrute y las estancias del turismo en la ciudad.

1.3 Dimensión social de la sostenibilidad 

• La actividad turística también se distingue por la generación de puestos de trabajo remunerados, que en 2018 ascendieron a 320,903, lo que presentó el 5% de los puestos de trabajo totales de la ciudad. La mayor parte correspondió a trabajo masculino. El trabajo femenil contribuyó con el 44% del total, es decir, con 130,419 puestos de trabajos remunerados.

• Es de destacar la elevada informalidad del trabajo en el sector turístico en la CDMX, ya que en los servicios de alojamiento y restaurantes fue del 71%, con 235,599 trabajadores, ligeramente más elevado que el promedio nacional.4

• En la CDMX se pagan las remuneraciones medias más altas del sector turístico, que en 2018 fueron de 216,289 pesos corrientes por puesto de trabajo ocupado remunerado, 27% más que el promedio nacional, que fue de 170,063 pesos.

• Por lo que respecta a la gobernanza y gestión turística para el año base considerado se disponía de las instituciones y dependencias especializadas para la atención del sector: Secretaría de Turismo de la CDMX y el Fondo Mixto de Promoción Turística de la Ciudad de México, que recauda el impuesto por servicios de hospedaje especificado en la legislación. También dispuso para 2018 de una página web especializada para la promoción on line de su oferta turística. No contaba con propuestas de legislación para el fenómeno de plataformas de reservaciones digitales tipo Airbnb. Si dispone de un Plan de Desarrollo del Sector Turístico. En lo referente a las campañas publicitarias, se destinaron importantes recursos fiscales, pero no se contó con evaluaciones integrales que permitan conocer las tasas de retorno de esa inversión publicitaria.

2 Cancún, Quintana Roo

Cancún, como prototipo de centro turístico maduro en desarrollo, representa a las grandes ciudades que concentran la mayor parte de la producción turística con importante afluencia del exterior, así como a los centros turísticos especializados (Ver Anexo III. Base de datos por municipios y localidades turísticas)

2.1 Dimensión económica de la sostenibilidad

• El centro turístico de Cancún se localiza en el municipio de Benito Juárez, en la región de la península de Yucatán, integrado por los estados de Campeche, Quintana Roo y Yucatán. El PIB turístico de esta región ascendió a 162.2 miles de millones de pesos corrientes a precios básicos en 2018, lo que representó el 9% del total nacional. Quintana Roo contribuyó con el 6%, Yucatán con 2% y Campeche con el 1 por ciento.

• La localidad de Cancún es uno centros turísticos de playa más importantes para el mercado internacional. Sus principales atractivos son sus playas y actividades acuáticas en el mar del Caribe. En 2018 contribuyó con el 3% del PIB turístico nacional, el 47% del PIB turístico del estado de Quintana Roo y el 96% del PIB turístico del municipio de Benito Juárez, con un valor que ascendió a 55,094.47 millones de pesos

• De sus atractivos naturales destaca la laguna Nichupté, que cuenta con marinas y muelles idóneos para la práctica de deportes acuáticos, así como una diversidad de arrecifes en mar abierto o en cenotes y cavernas subterráneas, donde se puede practicar el buceo, como el Arrecife Maya, considerado como el segundo arrecife más grande del mundo. Otros arrecifes son los de Banderas, El Bajito, San Miguel y Aristos. Adicionalmente, se ofrecen servicios de pesca deportiva, tanto para principiantes como para expertos.

• La oferta turística del municipio de Benito Juárez destaca porque contribuyó con 3,924 establecimientos de servicios de alojamiento temporal y preparación de alimentos, que correspondió al 40% de la entidad.

• Cancún sobresale por su oferta turística de alojamiento, con 12,746,381 de los cuartos disponibles del país, que representaron el 36% de la oferta de cuartos disponibles de la entidad y el 6% del total nacional.

• Las remuneraciones totales turísticas del municipio de Benito Juárez en 2018 ascendieron a 8,621.60 millones de pesos, las más altas para el estado de Quintana Roo, ya que representaron el 45% de la entidad y el 2% nacional.

• La productividad laboral de las actividades turísticas es una de las más altas del país, con 1,405,715 pesos corrientes por trabajador al año del 2018, es decir, 58% más que el promedio nacional, que fue de 817,979 pesos para ese mismo año.

• Cancún es el centro turístico con mayor recepción de turistas del exterior. De los 8,515,701 turistas que recibió, 6,040,796 son extranjeros, es decir, casi una tercera parte del país con el 29% del total. Además, concentró el 51% de los turistas que llegan a Quintana Roo y el 7%nacional.

• Es uno de los centros turísticos predilectos de los extranjeros, como lo demuestra el vertiginoso crecimiento en la llegada de turistas internacionales entre 2012 y 2022 con respecto a los nacionales. Sin embargo, debido a la emergencia sanitaria por covid 19, este flujo se redujo drásticamente a partir del 2020 y no ha recuperado los niveles que tenía antes de la pandemia del 2020, mientras que el turismo nacional sí lo hizo.

Además, la afluencia de turistas a Cancún varía dependiendo de si son nacionales o extranjeros. En los nacionales, la mayor afluencia corresponde a los meses de julio, agosto y diciembre, y en los extranjeros a marzo y diciembre, como se muestra en las siguientes gráficas:

El porcentaje máximo de ocupación se encuentra en los periodos vacacionales; destaca el mes de julio con 86%, mientras que el mínimo se presenta en los meses de septiembre y octubre, con el 59%.

La estimación del gasto promedio por visitante de Cancún no se puede realizar con certidumbre debido a que existen diversas fuentes con estimaciones muy variadas.

2.2 Dimensión ambiental de la sostenibilidad

• La sostenibilidad ambiental del turismo en Cancún es un tema crítico debido a la alta demanda de recursos naturales y los impactos negativos que genera esta actividad. La gestión del agua es particularmente problemática, ya que los turistas consumen más agua que los residentes locales, lo que pone en riesgo la sostenibilidad hídrica de la región.

• En 2022 se extrajeron 100 hectómetros cúbicos de agua potable, un aumento considerable respecto a los 70.43 Hm³ de 2013, lo que refleja una sobreexplotación de los recursos hídricos. Esta alta demanda afecta en especial a los grupos vulnerables que ya enfrentan cortes de agua prolongados. La distribución inequitativa del agua y el estrés hídrico, agravado por el cambio climático, son problemas críticos que requieren de una gestión rigurosa para asegurar la disponibilidad del recurso a largo plazo.

• La generación de residuos sólidos urbanos (RSU) es otro desafío ambiental significativo. Los turistas generan 92% más de basura diaria en comparación con los residentes, lo que agrava los problemas de manejo y disposición final de residuos en el municipio de Benito Juárez. La insuficiente capacidad de almacenamiento y disposición de residuos no sólo pone en riesgo la salud pública, sino también el ecosistema local, con la contaminación del suelo y agua como posibles consecuencias. La gestión inadecuada de los residuos sólidos y la falta de infraestructura son problemas que requieren soluciones urgentes para evitar un impacto ambiental severo.

• Las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) del sector turístico en Cancún son considerablemente altas. Los turistas emiten 97% más de CO2 por día en comparación con los residentes. La contribución significativa de los turistas a las emisiones de CO2 exacerba el cambio climático y destaca la necesidad de estrategias para mitigar estas emisiones. La reducción de áreas verdes, que actúan como sumideros de carbono, debido al crecimiento turístico y urbano, disminuye la capacidad de la región para mitigar sus propias emisiones, lo que incrementa su vulnerabilidad ambiental.

• La expansión turística sin una planificación adecuada ha llevado a una notable disminución en la cobertura de ecosistemas en Cancún, con una reducción de más del 60% desde 1997. La conversión de espacios naturales a urbanos aumenta la competencia por recursos naturales y fragmenta los ecosistemas, de lo que resulta la pérdida de servicios ecosistémicos esenciales. La falta de áreas verdes adecuadas per cápita también afecta negativamente la calidad de vida de los residentes y disminuye la atracción turística. Sin una estrategia clara y sostenible, Cancún corre el riesgo de perder competitividad frente a otros destinos turísticos que priorizan la conservación ambiental y la sostenibilidad.

• El desarrollo de políticas ambientales en Cancún debe centrarse en la sostenibilidad y la resiliencia al cambio climático. Algunas políticas clave incluyen la gestión sostenible del agua, que promueva su uso eficiente, la reutilización y la conservación. Esto puede incluir la instalación de tecnologías de ahorro de agua en hoteles y otras infraestructuras turísticas, así como campañas de concientización para turistas y residentes.

• Asimismo, es crucial mejorar la gestión de residuos mediante el desarrollo de infraestructuras adecuadas para la recolección, tratamiento y disposición final de residuos, fomentando la separación en origen y el reciclaje, y con regulaciones estrictas para la gestión de residuos sólidos en el sector turístico. Además, se deben implementar políticas que promuevan el uso de energías renovables y la eficiencia energética en el sector turístico, con el fomento de transporte público y otras formas de movilidad sostenible, como bicicletas y vehículos eléctricos.

• La conservación de ecosistemas también es vital. Se deben proteger y restaurar áreas verdes y ecosistemas críticos que actúan como sumideros de carbono, lo cual incluye la conservación de selvas y manglares, que no sólo mitigarán las emisiones de CO2, sino también preservarán la biodiversidad y los servicios ecosistémicos esenciales.

• El cambio climático agrava los problemas ambientales en Cancún, como el estrés hídrico y la degradación de ecosistemas. La reducción de áreas verdes y el aumento de la urbanización disminuyen la capacidad de la región para mitigar sus propias emisiones de carbono, lo que incrementa la vulnerabilidad a los efectos del cambio climático. Enfrentar este reto requiere una planificación integral y sostenible que incorpore la resiliencia climática en el desarrollo turístico.

• Las políticas ambientales y el uso de indicadores precisos son fundamentales para mitigar los impactos negativos del turismo en Cancún y enfrentar los retos del cambio climático. Sólo a través de un enfoque sostenible se puede asegurar que continúe siendo un destino turístico atractivo y viable a largo plazo, al tiempo que se protege el bienestar de sus residentes y el medio ambiente.

5.2.3 Dimensión social de la sostenibilidad

El turismo en el municipio de Benito Juárez, en Quintana Roo, creó 40,791 puestos de trabajo remunerados en 2018, que correspondió al 14% del total del municipio, participación superior al promedio nacional.

• La mayor parte de dichos puestos correspondió a trabajo masculino. Sólo 16,368 del total de los puestos de trabajos remunerados en servicios turísticos correspondió a mujeres, con 40% del total.

• El nivel de informalidad laboral de Benito Juárez, en donde se encuentra la localidad de Cancún, es baja, si se compara con los datos nacionales y de otras entidades federativas, ya que si se asocia la población ocupada en el sector de restaurantes y servicios de alojamiento de la ENOE de la entidad donde se encuentra Cancún, sólo el 30% de la población ocupada es informal 5.

• Asimismo, el pago promedio de remuneraciones al trabajo del sector turístico está por arriba del promedio nacional. En Cancún ascendió a 211,359 pesos corrientes, mientras que el nacional fue de 170,063 pesos, es decir, 80% de lo recibido en dicha localidad.

Por la parte de la gobernanza y gestión del turismo se posiciona como una de las más activas y profesionalizadas. El municipio destaca por disponer de programas y planes de desarrollo elaborados por la autoridad estatal, alineados con los ODS de la ONU. También cuenta con instancias y dependencias especializadas como la Sectur Quintana Roo y la Sectur municipal. El IMPLAN tuvo un papel relevante en su momento, aunque los temas de uso de suelo y densidades presentaron modificaciones que aceleraron el crecimiento inmobiliario. Adicionalmente se observó un esfuerzo por consolidar el Consejo de Promoción Turística de Quintana Roo, que ejercía los recursos recaudados por el Impuesto sobre Servicios de Hospedaje. Destaca la creación del Fondo de Atención Ambiental y Turístico como un derecho que prevé normar la afectación que la actividad ha provocado en los recursos naturales y culturales de la entidad; no obstante, se requiere conocer los beneficios que dicho Fondo ha generado en el territorio de Cancún. Otra herramienta clave es el Fondo para la Atención de Saneamiento Ambiental y Promocional Turística de Quintana Roo. Cancún carece de legislación para atender la problemática de las plataformas digitales de alojamiento tipo Airbnb. La presencia de Fonatur a partir del año 2000 ha tenido menos influencia y en la actualidad la entidad enfrenta el reto de asumir muchas de las facultades y atribuciones del fideicomiso, lo que trae desafíos relevantes para el futuro cercano en materia de plantas de tratamiento de agua y mantenimiento de infraestructura, temas que la entidad está asumiendo.

3 Los Cabos, Baja California Sur

Los Cabos, como prototipo de centro turístico emergente orientado al turismo extranjero, puede representar al conjunto de centros turísticos que se caracterizan por un impulso reciente de la actividad turística y por la afluencia de turistas extranjeros y centros turísticos especializados (Ver Anexo III. Base de datos por municipios y localidades turísticas).

3.1 Dimensión económica de la sostenibilidad

• Los Cabos agrupa a dos centros turísticos: Cabo San Lucas y San José del Cabo, que se localizan en el municipio de Los Cabos, en el Mar de Cortez, en el extremo sur de la península de Baja California Sur.

• El principal activo del municipio es su ubicación geográfica al sur de la entidad; colinda al norte con el municipio de La Paz; al sur y este con el golfo de California en el Mar de Cortez, y al oeste con el Océano Pacífico. Esta localización es estratégica debido a que cuenta con una gran extensión de costas y diversidad marina que favorecen las actividades de sol y playa, así como ejercicios acuáticos como el buceo, la pesca deportiva y el ecoturismo.

• Posee áreas naturales protegidas y es uno de los destinos turísticos más importantes para la pesca deportiva y la celebración de un gran número de torneos internacionales de golf. Dichas actividades se realizan en Cabo San Lucas, mientras que San José del Cabo se caracteriza como un lugar de descanso.

• El municipio de Los Cabos se posiciona como uno de los lugares turísticos más importantes en el norte del país, gracias a que alberga los dos principales centros turísticos de playa para el mercado internacional, que son Cabo San Lucas y San José del Cabo.

• El municipio aportó el 71.3% del PIBT de la entidad (PIBTE) y 1.2% del PIB Turístico (PIBT) nacional en 2018, con 23,195.42 millones de pesos corrientes de ese año a precios básicos.

• Las remuneraciones totales turísticas del municipio de Los Cabos en 2018 ascendieron a 4 mil 755.29 millones de pesos, que representaron el 72%del total del estado de Baja California Sur y el 1.2% nacional.

• La productividad laboral de las actividades turísticas fue de 1,049,096 pesos corrientes por trabajador al año, una de las más altas del país, alrededor de 20% más que el promedio nacional, que fue de 817,979 pesos.

• La oferta turística del municipio de Los Cabos destaca porque contribuyó con 1,922 de los establecimientos en el sector, como son los hoteles y otros servicios de alojamiento y de preparación de alimentos y bebidas, que corresponden al 40% de la entidad, concentrándose más de la mitad en Cabo San Lucas.

• Los Cabos participaron con 4,323,669 de los cuartos disponibles del país, que significaron el 82% de la oferta en la entidad y el 3% del total nacional.

• En 2018 Cabo San Lucas y San José del Cabo recibieron a 1,549,045 turistas, lo que representó el 50% de la entidad y el 1% nacional. Ambos se destacan por su orientación al mercado internacional, ya que en ese año 1,168,74 turistas fueron extranjeros (75%) y únicamente 380,304 nacionales (25%).

• No obstante, la mayor afluencia tuvo como destino a Cabo San Lucas, con el 69% del total de los turistas extranjeros, y el 31% restante visitó San José del Cabo.

• Ambos destinos son predilectos para los extranjeros. En Cabo San Lucas, la llegada de turistas internacionales tuvo un crecimiento continuo hasta 2019, mientras que el turismo nacional se mantuvo estancado. Sin embargo, en 2020 la afluencia de turistas extranjeros sufrió una importante caída, que también padeció el turismo nacional debido a la pandemia por covid 19. En los siguientes años la llegada del turismo internacional volvió a recuperar con creces los niveles que tenía en 2020, mientras que el turismo nacional mantuvo la misma tendencia.

En San José del Cabo, tanto el turismo internacional como el nacional mostró una dinámica de crecimiento hasta el año 2019, con una significativa caída en el año 2020 a causa de la pandemia por covid 19. Este destino no volvió a recuperar los niveles que tenía antes de la pandemia, pero después del año 2020 el comportamiento de los turistas extranjeros muestra la misma tendencia que los nacionales.

• Los Cabos se distingue también la estacionalidad de su demanda, ya que existe una variación cíclica de la afluencia del turismo a lo largo del año. La mayor afluencia coincide con los periodos vacacionales: marzo (semana santa), julio (verano) y diciembre (invierno). En Cabo San Lucas la mayor afluencia es en el mes de julio, mientras que en San José del Cabo es en el mes de marzo.

• Además, se diferencian porque Cabo San Lucas presentó las menores afluencias en mayo y septiembre, mientras que en San José del Cabo fue en mayo, septiembre y octubre, como se puede observar en las siguientes gráficas.

La estimación del gasto promedio por visitante en el municipio de los Cabos no se puede realizar con certidumbre, debido a que existen varias fuentes con estimaciones muy diversas.

3.2 Dimensión ambiental de la sostenibilidad

• La actividad turística en Los Cabos presenta desafíos ambientales significativos, derivados del elevado consumo de recursos y la generación de residuos. La demanda de agua es una preocupación central, ya que Los Cabos está ubicado en una región árida con recursos hídricos limitados.

• La expansión de la infraestructura turística y el aumento de visitantes incrementan la presión sobre los acuíferos locales, muchos de los cuales ya muestran un déficit hídrico notable. De hecho, el consumo de agua por turista es mayor que el de la población residente. Los turistas consumen 575 litros, contra 200 litros de la población residente. Además, la mala calidad del agua disponible en algunos acuíferos complica aún más la situación, lo que afecta tanto a los residentes como a los turistas.

• La generación de residuos sólidos urbanos (RSU) también es alarmante, con una producción diaria que supera la capacidad de los rellenos sanitarios existentes, muchos de los cuales no cumplen con las normativas ambientales. La falta de gestión eficiente de los residuos y la proliferación de tiraderos ilegales contaminan el suelo, el agua y el aire, que afectan la salud pública y deterioran el atractivo paisajístico del destino turístico. Asimismo, los visitantes generan 1.9 kg de residuos sólidos por día, contra 1.4 kg de los residentes.

• La emisión de gases de efecto invernadero (GEI) por la actividad turística contribuye significativamente al cambio climático. El transporte aéreo y terrestre de turistas, junto con el elevado consumo energético en instalaciones turísticas, aumentan la huella de carbono de la región. La falta de un sistema de monitoreo adecuado impide la implementación de estrategias efectivas para mitigar estas emisiones. Las mediciones de la huella de carbono por turista son muy superiores a las de la población residente, ya que es de 46 KgCo2 eq/día por hab, mientras que la de la población residente es de 9.75 KgCo2 eq/día por hab (kilogramo de bióxido de carbono equivalente por habitante al día).

• La conservación de los ecosistemas es esencial para la sostenibilidad de Los Cabos como destino turístico. La expansión urbana y turística ha llevado a una significativa pérdida de cobertura vegetal, especialmente del matorral sarcocaule, que proporciona servicios ecosistémicos vitales. Esta pérdida aumenta la vulnerabilidad de la región a eventos climáticos extremos y disminuye la calidad de vida de los residentes locales.

Para garantizar la sostenibilidad del destino, es crucial implementar políticas de gestión ambiental que promuevan el uso eficiente de los recursos hídricos, la adecuada gestión de residuos y la reducción de emisiones de GEI. Además, es fundamental conservar y restaurar los ecosistemas naturales, asegurando una cobertura verde adecuada que beneficie tanto a residentes como a turistas. La colaboración entre el sector turístico, las autoridades locales y la comunidad es clave para equilibrar el desarrollo económico con la protección ambiental y social, para asegurar que Los Cabos continúe siendo un destino atractivo y sostenible a largo plazo.

3.3 Dimensión social de la sostenibilidad

• En 2018, la generación de puestos de trabajo ocupados remunerados en el sector turístico en Los Cabos ascendió a 22,110, lo que representó el 14% de los puestos de trabajo del municipio, que es el doble del promedio nacional. No obstante, la participación de las mujeres en los puestos de trabajo sólo alcanzó el 41% del total, con 8,820.

• Los Cabos también se distingue por su bajo nivel de informalidad laboral en el sector turístico, comparado con el ámbito nacional, ya que en 2018, en la rama de restaurantes y servicios de alojamiento, fue del 26%, mientras que el nacional es mayor al 70 por ciento.

• Cabo San Lucas tuvo para ese año 5,592 trabajadores informales en el sector turismo, mientras que en San José del Cabo fueron 3,816 (Ver nota metodológica informalidad turística en la localidad de Cancún).

• En el municipio de Los Cabos las remuneraciones medias por trabajador en el sector turístico son alrededor de 26% más altas que el promedio nacional. En 2018 fueron de 215,075 pesos corrientes por puesto de trabajo remunerado, contra 170,063 pesos de la media nacional.

• Por lo que respecta a la gestión turística destaca la participación del Instituto Municipal de Planeación de Los Cabos (IMPLAN), así como el Fideicomiso de Turismo de Los Cabos, (Fiturca) que promueven la participación de los representantes de la industria para temas de promoción y generación de información para inteligencia comercial. Cabe señalar que son pioneros a escala municipal en la medición de la percepción de la comunidad local sobre la actividad turística. Por tratarse de un Centro Integralmente Planeado Fonatur, es un referente en la dinámica turística local, aunque cada vez con menor protagonismo. No obstante, los retos que enfrenta en materia de sostenibilidad por el acelerado crecimiento de la oferta turística inmobiliaria, requieren una gobernanza y gestión sin precedentes para un destino nacional.

4 Puerto Vallarta, Jalisco 

Puerto Vallarta, como prototipo de centro turístico maduro estancado, representa a las ciudades especializadas en turismo que registran estancamiento y en donde la afluencia de turistas nacionales y extranjeros es importante (Ver Anexo III. Base de datos por municipios y localidades turísticas). 

4.1 Dimensión económica de la sostenibilidad

• Puerto Vallarta es considerado como un centro turístico tradicional de playa en el Pacífico de México, que se localiza en la costa de Bahía de Banderas, en el extremo poniente del estado de Jalisco, en el centro occidente del país, y sus principales atractivos son sus playas y su amplia gama de oferta turística.

• Su clima es caluroso. Dura 4.5 meses, con temperatura máxima promedio diario de 31°C. El invierno es fresco y dura 3.8 meses. La temperatura máxima promedio diaria es menos de 28° centígrados.

• En 2018 este centro turístico aportó el 11%% del PIB del estado de Jalisco y el 1% del PIB turístico nacional, con un valor del PIB turístico local que ascendió a 14,673.63 millones de pesos corrientes de ese año a precios básicos, y el 83% del PIB turístico del municipio Puerto Vallarta.

• La relevancia de las actividades turísticas para el municipio se refleja en su aportación al PIB total municipal, con el 31% y 33% de los servicios municipales, participaciones más de dos veces superiores al estado de Jalisco y al promedio nacional.

• Las remuneraciones totales turísticas del municipio de Puerto Vallarta en 2018 ascendieron a 4,314.85 millones de pesos, una de las más altas de Jalisco, después de Guadalajara y Zapopan, ya que representaron el 14% de la entidad y el 1% nacional.

• La productividad laboral del turismo en 2018 representa 807,624 pesos corrientes por trabajador al año, monto por arriba de la media estatal y ligeramente menor a la nacional, que fue de 817,979 pesos para ese mismo año.

• La oferta municipal de hoteles y otros servicios de alojamiento y preparación de alimentos y bebidas fue de 2,328 establecimientos, que representan el 5% del total del estado de Jalisco.

• En 2018, Puerto Vallarta aportó 3,331,990 de los cuartos disponibles del país, que representaron el 28% de la oferta de la entidad y el 3% del total nacional.

• En 2018 recibió a 2,101,748 visitantes, es decir, 23% de los turistas de la entidad y el 2% nacional. Este centro turístico se destaca por su orientación al mercado nacional, ya que para ese mismo año atrajo 1,368,354 turistas nacionales, 65% del total, y 733,394 extranjeros, el 35 por ciento.

• En el caso del turismo nacional, presentó un marcado crecimiento de marzo a julio, al pasar de 98,780 a 179,841, periodo que incluye las vacaciones de semana santa y de verano.

• Puerto Vallarta es un destino con una afluencia de turistas nacionales muy importante que se complementa con el turismo extranjero. La dinámica de crecimiento del turismo nacional e internacional mantuvo la misma tendencia hasta el 2019, pues tuvo una significativa caída en 2020 debido a emergencia sanitaria por covid 19. Después de ésta, la llegada tanto de turistas nacionales como internacionales recuperó los niveles de afluencia prepandemia.

No obstante, de julio a septiembre se caracteriza por un marcado descenso de la afluencia , cuando registra uno de sus puntos más bajos, junto con el mes de febrero. Repunta en las vacaciones de invierno en el mes de diciembre, con la llegada de 117,848 turistas nacionales.

Por otra parte, el comportamiento de la afluencia del turismo internacional en Puerto Vallarta es inverso a la tendencia de los turistas nacionales, ya que en este caso la afluencia crece del mes de septiembre a marzo del siguiente año.

La estimación del gasto promedio por visitante en Puerto Vallarta no se puede realizar con certidumbre debido a la variedad de fuentes con estimaciones muy diversas.

4.2 Dimensión ambiental de la sostenibilidad

• Puerto Vallarta enfrenta una serie de desafíos ambientales vinculados al manejo y distribución del agua, la generación de residuos sólidos y la emisión de gases de efecto invernadero (GEI). La gestión del agua en el municipio es, en general, eficiente, con una extracción anual de 34.5 hectómetros cúbicos (Hm³) en 2019. No se han reportado problemas severos de escasez o distribución intermitente, lo cual es positivo. Sin embargo, las altas tasas de consumo per cápita, especialmente entre los turistas (575 litros diarios), junto con el consumo del sector hotelero, cruceros y campos de golf, indican una creciente demanda que podría poner en riesgo los acuíferos locales si no se gestionan adecuadamente.

• A pesar de la falta de información en ciertos sectores críticos, como el consumo de agua del sector hotelero y otras actividades turísticas, es crucial desarrollar sistemas de recolección de datos más completos. Esta información permitirá diseñar estrategias de monitoreo y gestión sostenible para garantizar la disponibilidad de agua a residentes y turistas, sin comprometer la salud de los ecosistemas locales.

• La generación de residuos sólidos también es un problema significativo. Se estima que anualmente se recolectan alrededor de 136,875 toneladas de residuos, con un aumento considerable durante la temporada turística. La emisión de residuos por turista es notablemente alta, lo que incrementa la presión sobre los sistemas de gestión de residuos del municipio. Aunque el servicio de recolección es eficiente, la falta de información sobre el estado de los sitios de disposición final plantea serias preocupaciones sobre su capacidad para manejar adecuadamente el volumen de residuos generados.

• Para mitigar estos problemas, es fundamental implementar estrategias de reciclaje y economía circular. Fomentar hábitos de consumo responsables y sostenibles entre los residentes y turistas puede aliviar la presión sobre los sitios de disposición final y prevenir la apertura de nuevos sitios en áreas naturales en conservación. La promoción de la separación de residuos, el compostaje y la reducción de la generación de residuos en origen son medidas esenciales.

• La emisión de GEI es otro desafío ambiental importante. En 2019, las emisiones de CO2 (bióxido de carbono) equivalente (CO2eq) ascendieron a aproximadamente 1,689,146.27 toneladas. La combinación de las emisiones generadas por residentes y turistas eleva esta cifra significativamente. Los hábitos de consumo, especialmente en cuanto al confort en las habitaciones y el sistema de transporte, son las principales fuentes de estas emisiones. La deficiente infraestructura de transporte público y la falta de cobertura vegetal agravan la situación, lo que exacerba los problemas de islas de calor urbanas y aumenta la vulnerabilidad del municipio a los efectos del cambio climático.

• Para abordar estas cuestiones es necesario mejorar la infraestructura verde y promover el uso de tecnologías limpias y sostenibles. La reforestación de áreas degradadas y la creación de parques urbanos pueden ayudar a mitigar los efectos del cambio climático. Además, es crucial actualizar el sistema de transporte público para hacerlo más eficiente y menos dependiente de combustibles fósiles.

• Aunque Puerto Vallarta no ha experimentado un deterioro ambiental tan severo como otros destinos turísticos, como Cancún, la presión del turismo y el crecimiento poblacional requieren una acción inmediata y efectiva para conservar sus ecosistemas. La selva mediana subcaducifolia y otros espacios verdes son vitales para la sostenibilidad ambiental y la salud pública. La preservación y restauración de estos ecosistemas son esenciales para enfrentar los desafíos del cambio climático y asegurar un futuro próspero para el municipio.

• Implementar políticas de conservación, educación ambiental y estrategias de desarrollo sostenible permitirá a Puerto Vallarta equilibrar el crecimiento turístico y la preservación ambiental. Sólo mediante un enfoque integral y colaborativo se podrá garantizar la calidad de vida de los residentes y mantener el atractivo del destino turístico. La combinación de gestión eficiente de recursos, reducción de impactos ambientales y promoción de prácticas sostenibles es clave para el futuro del puerto.

4.3 Dimensión social de la sostenibilidad

• La actividad turística en Puerto Vallarta generó 21,973 puestos de trabajo remunerados en el año 2018, que representó el 18% del total municipal, participación que fue tres veces superior al promedio nacional y a la media de la entidad. No obstante, sólo 10,144 correspondieron a mujeres, con el 48% del total de los puestos de trabajo.

• Además, Vallarta presenta un alto nivel de informalidad, con el 68% del personal ocupado remunerado en el sector de restaurantes y servicios de alojamiento para 2018, ligeramente menor al promedio nacional (Ver nota metodológica informalidad turística en la localidad de Cancún).

• Sin embargo, los trabajadores del sector turismo de Puerto Vallarta reciben una de las remuneraciones medias más altas en el sector, que en 2018 ascendieron a 196,373 pesos corrientes por puesto de trabajo, mientras que la media de la entidad fue de 174,791 pesos y la nacional de 170,063 pesos.

En lo que refiere a la gobernanza local, destaca la existencia de dependencias y entidades especializadas que atienden al sector, desde lo estatal y en lo municipal, con la activa participación de residentes locales en mesas de trabajo, así como de unidades académicas con amplia experiencia y conocimiento local. El destino cuenta con más de 10 mil anfitriones que rentan sus propiedades en plataformas digitales tipo Airbnb, para las que no hay legislación ni programas de atención. Este fenómeno inmobiliario es una amenaza por la precarización de la oferta que puede surgir de continuar esta tendencia en detrimento de la atracción de inversión de empresas de prestación eminentemente turísticas. Este destino aparece en la lista de recomendaciones de grandes fondos financieros para temas meramente inmobiliarios, como es el caso de Black Rock. La recaudación de recursos por concepto del Fideicomiso de Turismo local es ejercida de manera colegiada, lo que favorece la promoción y gestión local.

5 Valle de Bravo, estado de México 

Valle de Bravo, Edomex, es un centro turístico prototípico de los pueblos mágicos por las características de su proceso de desarrollo sostenible turístico (Ver Anexo III. Base de datos por municipios y localidades turísticas).   

5.1 Dimensión económica de la sostenibilidad

• Valle de Bravo es un centro turístico con la denominación de pueblo mágico a partir de 2005. Se ubica en el sur poniente del estado de México, cercano a los límites con Michoacán. Se encuentra en un valle con el embalse de la presa Miguel Alemán o Valle de Bravo.

• El clima es templado subhúmedo, con lluvias en verano, de mayor humedad (78.59%), semicálido subhúmedo con lluvias en verano, de humedad media (20.97%), y semicálido subhúmedo con lluvias en verano, de mayor humedad (0.44%).

• En 2018 este centro turístico aportó el 69% del PIB turístico del municipio de Valle de Bravo, el 0.4% del PIB turístico del estado de México y el 0.04% del PIB turístico nacional, con un valor del PIB turístico local que ascendió a 662.09 millones de pesos corrientes de ese año a precios básicos.

• Las actividades turísticas de Valle de Bravo contribuyen con el 12 y el 13% de los servicios municipales, participaciones ligeramente superiores al promedio del estado de México.

• El pago a los trabajadores del turismo de Valle de Bravo en 2018 es reducido, ya que fue de apenas 192.40 millones de pesos. Aportan el 0.7% de las remuneraciones totales de la entidad.

• La productividad laboral de las actividades turísticas del municipio de Valle de Bravo en 2018 es muy baja, si se compara con el promedio de la entidad o del país. La productividad media por trabajador de Valle de Bravo es de 667,493 pesos corrientes por trabajador al año, mientras que los promedios de la entidad y del país fueron, respectivamente, de 966,416 y 817,979 pesos para ese mismo año.

• Además, la oferta turística hotelera y de servicios de preparación de alimentos y bebidas en 2018, contribuyó con una mínima parte de la entidad, con 378 establecimientos que representaron el 0.5% del estado de México.

• Destaca la oferta de cuartos disponibles anuales, con 435,985 para 2018, que representaron el 0.2% del total nacional y el 8% del estado de México.

• No obstante, Valle de Bravo reportó una muy baja ocupación hotelera (23.4%), que correspondió en su totalidad a turistas nacionales.

• En 2018 recibió a 216,006 visitantes, de los cuales casi la totalidad son turistas nacionales. Su participación en la recepción del turismo fue del 6% si se compara con el total de la entidad y el 0.2% nacional.

• Valle de Bravo es un pueblo mágico cuyo mercado está enfocado completamente al turismo nacional, con un crecimiento vertiginoso de 2016 a 2019; en 2020 sufrió una abrupta caída debido a la emergencia sanitaria por covid19. Desde entonces no ha vuelto recuperar sus niveles de afluencia de turismo nacional prepandemia, aunque en 2022 registró un ligero repunte 2022 de turistas internacionales.

Valle de Bravo, de la misma manera que los otros centros turísticos analizados, se caracteriza por su estacionalidad en la afluencia turística, la mayor corresponde a los meses de marzo, julio y diciembre.

La estimación del gasto promedio por visitante en Valle de Bravo no se puede realizar con certidumbre debido a que existen diversas fuentes con estimaciones muy variadas.

5.2 Dimensión ambiental de la sostenibilidad

El municipio de Valle de Bravo enfrenta importantes desafíos relacionados con la sostenibilidad, particularmente en la gestión de recursos hídricos, residuos sólidos urbanos, emisiones de gases de efecto invernadero y la conservación de ecosistemas. La disponibilidad y uso del agua, el manejo de residuos, las emisiones de carbono y la preservación de los bosques son aspectos críticos que requieren atención y acción coordinada para asegurar un desarrollo turístico sostenible.

• La disponibilidad de agua es un eje central para el desarrollo de actividades en Valle de Bravo, incluido el turismo. Con un consumo anual estimado de 8.46 Hm3, la mayor parte del agua proviene de manantiales. Aunque no se reporta un déficit hídrico, el consumo de agua per cápita revela que los turistas consumen el 83% del agua diaria disponible. Si se considera una estancia promedio de seis días, el consumo anual cambia, y es la población residente la que consume el 91% del total estimado. Este dato no implica que el impacto turístico sea bajo, ya que falta considerar el consumo de hoteles y otros servicios turísticos, por lo que es necesario un diagnóstico más detallado, así como la cooperación interinstitucional para gestionar adecuadamente el recurso hídrico.

• El manejo de residuos sólidos urbanos (RSU) muestra un patrón similar al del consumo de agua. Diariamente, los turistas generan el 83% de los residuos, mientras que anualmente la población residente es responsable del 92% de las emisiones. A pesar de que el municipio cuenta con un espacio para el destino final de los RSU, no se conoce oficialmente su capacidad máxima ni la calidad de sus servicios, lo que subraya la necesidad de mejorar la gestión de residuos para mitigar el impacto ambiental del turismo.

• El inventario estatal de 2020 estimó que Valle de Bravo emitió 22,001,900 toneladas de CO2eq, incluyendo todos los sectores productivos y residenciales. Per cápita, la población residente es el mayor emisor de CO2 con el 79% de las emisiones anuales. Sin embargo, el sector turístico también contribuye significativamente, por lo que es crucial implementar estrategias de mitigación y reducción de gases de efecto invernadero (GEI) en este sector.

• El turismo en Valle de Bravo no sólo genera cambios económicos, sino también transforma el territorio, lo que se refleja en el deterioro ambiental y la ocupación del espacio. Con una estimación de cinco turistas por m² comparado con un habitante, la presión sobre los ecosistemas se triplica. El principal ecosistema afectado es el bosque de pino y pino-encino, que, en comparación con 2010, han crecido sólo 3.1 km², mientras que la expansión urbana fue de más de 7 km² en 2021. Esta pérdida de ecosistemas cerca de actividades urbanas y turísticas es crítica, ya que la Organización Mundial de la Salud recomienda 9 m² de cobertura verde por habitante, y en Valle de Bravo sólo hay 3.3 m² por habitante (residentes y turistas). La conservación de estos ecosistemas es fundamental para reducir riesgos y mitigar los efectos del cambio climático.

• Valle de Bravo enfrenta un complejo desafío para equilibrar el desarrollo turístico con la sostenibilidad ambiental. La gestión adecuada del agua, los residuos, las emisiones de carbono y la conservación de los ecosistemas son aspectos interrelacionados que requieren una estrategia integral.

• La cooperación entre entidades gubernamentales, sector privado y la comunidad es esencial para desarrollar políticas y prácticas sostenibles. Sólo mediante una gestión responsable y coordinada de los recursos naturales y una mitigación efectiva del impacto turístico se podrá asegurar que Valle de Bravo continúe siendo un destino atractivo sin comprometer su patrimonio natural y la calidad de vida de sus habitantes.

5.3 Dimensión social de la sostenibilidad

• En 2018 la generación de puestos de trabajo ocupados remunerados en el sector turístico en el municipio de Valle de Bravo fue de 1,432, que representa el 12% de los puestos de trabajo totales del municipio. Dicha participación fue superior al promedio nacional y al de la entidad.

• Los puestos de trabajo ocupados por mujeres son proporcionalmente semejantes a los que ocupan los hombres: 49.9% del total.

• No obstante, el porcentaje de informalidad de la fuerza laboral es muy elevado: 78% del total (Ver nota metodológica informalidad turística en la localidad de Cancún).

• En el municipio de Valle de Bravo se pagan las remuneraciones medias más bajas en el sector turístico, ya que en 2018 ascendieron a 134,400 pesos corrientes por puesto de trabajo ocupado remunerado, mientras que la media nacional fue de 170,063 pesos.

• Las comunicaciones privadas con informantes calificados demuestra la escasa gobernanza y gestión turística local, pues existen testimonios de no aprovechar programas y oportunidades ofrecidas por agencias internacionales especializadas en temas ambientales, lo que refleja un desconocimiento de las autoridades sobre los impactos provocados por el turismo en la localidad.

6 Consideraciones y oportunidades para los destinos seleccionados 

El trabajo de acopio de la información reveló la necesidad de contar con datos precisos para determinar el estatus de cada localidad. En todos los casos estudiados se carece de esta visión articulada y sistematizada desde un lenguaje común. En algunos casos la información mercadológica y comercial de la actividad es abundante; no obstante, la carencia de un marco conceptual consistente y la falta de series de tiempo debilitan la capacidad explicativa de los ejercicios disponibles como son las encuestas a los viajeros, habitantes locales, así como ciertas métricas sobre gasto promedio de los visitantes. La carencia de observatorios turísticos integrales con la participación de gobierno, iniciativa privada y academia es una constante que debilita la posibilidad de contar con evidencias sobre actividades y políticas practicadas, así como sobre las tres dimensiones de la sostenibilidad.